Muchas personas han optado por mantener una vida saludable, pero también hay otras que sólo implementan este estilo de vida en cuando se avecina el verano.
Sin embargo, tanto los que ahora han decidido alimentarse mejor como los que suelen llevar una vida sana siempre, pueden estar cometiendo errores nutricionales, sin saberlo.
Sobre este tema The Washington Post, publicó un artículo que dio a conocer los diez principales errores de este tipo que cometen las personas saludables y que te daremos a conocer.
Agregar linaza al desayuno
Muchos saben que las semillas de lino contienen grasas Omega 3, fibra y antioxidantes beneficiosos para la salud. A pesar de esto, el artículo precisa que éstos pueden pasar a través de los intestinos sin una digestión adecuada, por lo que sus beneficios no se aprovechan. Debido a esto, se recomienda usar linaza molida.
Hacer un batido nutritivo
Mezclar alimentos nutritivos como arándanos, chía, col, leche de coco o plátano puede convertirse en una práctica común por la facilidad para hacerlo, pero debe haber un límite.
Esto responde a que se puede crear una bomba calórica, por lo que se recomienda que se contabilicen las calorías de cada producto y que en total el combinado nunca supere las 300.
Tomar suplementos nutritivos con café
Por las mañanas suele ser una costumbre tomar una taza de café, sin embargo, si al mismo tiempo se ingieren suplementos nutritivos, como calcio, hierro, vitaminas B y D, puede no ser efectivo para tu vida saludable.
Esto se debe a que la cafeína obstaculiza la capacidad para absorber algunos de estos minerales, por lo que algunos té y bebidas también no deberían ser tomadas junto con los suplementos.
Frijoles enlatados como reemplazo de las comidas sin carne
Es cierto que los frijoles enlatados tienen una gran cantidad de fibras y proteínas, pero también cuentan con 1.000 mg de sodio por taza. Por ello, es necesario buscar latas que correspondan a las de “sin sal añadida” o “bajo en sodio”. En caso de no encontrarlos, se pueden secar y enjuagar los frijoles, práctica que se estima elimina el 40% de sodio que contienen.
No eliminar la fruta para eliminar el azúcar
Hay que tener claro que lo que más aporta azúcar al organismo son las bebidas azucaradas, las que además, no aportan ningún nutriente beneficioso. En cambio, las frutas además de azúcar, tienen vitaminas y antioxidantes, considerando que se tiende a tomar demasiada bebida y nunca comer demasiadas frutas.
Confiar en las afirmaciones “bajo en grasa” y “sin azúcar”
Generalmente cuando se compran alimentos uno suele fijarse en lo que no contiene, buscando cosas como grasas, azúcar o gluten. Sin embargo, en lo que realmente hay que fijarse es en qué contienen. Por lo mismo, es importante leer todos los ingredientes antes de comprar, ya que muchos pueden tener conservantes o ingredientes refinados.
Si bebes leches alternativa de caja en vez de la convencional, se debe agitar antes de ingerirla
Las leches de soja, almendras, anacardos y arroz como alternativas a la leche convencional, suelen tener buenas dosis de calcio y vitamina D.
Sin embargo, estos nutrientes suelen quedarse en el fondo de los cartones de leche, por lo que se recomienda agitarlos para que se pueden mezclar con todo el contenido.
Aliñar la ensalada
Vitaminas liposolubes del tipo A, E y K además de una serie de antioxidandes que requieren la absorción de grasas son las que contienen las verduras. Sin embargo, si no se les agrega aceite y vinagre, existe la posibilidad de que se pierden los nutrientes claves de la ensalada.
Dejar los probióticos por el yoghurt
Es cierto que el yoghurt, como leche fermentada, contiene elementos probióticos, pero esto no sucede en todos los casos. Esto se debe a que si el yoghurt fue calentado o pasteurizado estos nutrientes se destruyen, por lo que es necesario buscar en los ingredientes los nombres de probióticos específicos, como actobacillus acidophilus, L bulgaricus.
Bebidas energizantes
Este tipo de líquidos reemplaza los fluidos y electrolitos que se pierden cuando se suda en exceso, principalmente en las actividades deportivas de resistencia.
Sin embargo, el azúcar y sales añadidas que contienen para un ejercicio habitual, no son necesarias, por lo que en estos casos es mejor hidratarse con agua.