El alcohol que guardas en tu botiquín de primeros auxilios tiene múltiples utilidades. A continuación te contamos todo lo que puedes hacer con él, ¡Y más de algún uso te sorprenderá!
Desodorante provisional
Este es un truco para cuando sales de casa y te olvidas de ponerte desodorante. Basta con que encuentres cualquier alcohol de un botiquín o kit de primeros auxilios, te frotes las axilas con un poco, y te habrás deshecho de las bacterias que causan el mal olor. Es importante que hagas esto de forma ocasional, pues el uso prolongado puede irritar la piel y causarte distintos problemas.
Limpiador facial
Hay muchos tratamientos que prometen acabar con el acné, generalmente cremas o cualquier otro producto que contenga peróxido de benzolio. Pero aplicar alcohol en la zona afectada es un tratamiento bastante efectivo, gracias a sus propiedades antiinflamatorias.
Calmará el malestar de la piel y prevendrá la aparición del acné.
Basta que rocíes un poco de alcohol en un algodón y frota dando suaves movimientos en tu cara. Nunca te lo acerques a los ojos, y evita hacerlo más de una vez por semana, pues el uso constante generará piel irritable.
Deshazte de la pediculosis
Puedes usar el alcohol del botiquín para eliminar los piojos. Para lograrlo, tienes que poner alcohol y unas gotas de aceite de lavanda en una botella de spray. Aplica esta solución sobre el cabello y el cuero cabelludo de la persona afectada. Luego, repasa la zona con un peine para piojos para deshacerte de los piojos muertos.
Bolsa de frío
El alcohol no se solidifica si lo guardamos en la nevera, una propiedad que puede resultar muy útil si quieres crear una bolsa de frío casera.
Para hacerla, debes mezclar 2 partes de agua por 1 de alcohol en una bolsa de plástico sellable. Antes de ponerlo en la nevera, elimina todo el aire del interior de la bolsa. Déjalo alrededor de una hora en el congelador, y la bolsa estará lista para ser utilizada.
Quita la cera de tus oídos
Es bastante peligroso usar bastoncillos de algodón para eliminar la cera de las orejas, además de ser bastante ineficaz pues tiende a empujar la cera hacia adentro en vez de sacarla.
Como alternativa, puedes usar una mezcla a base de alcohol y vinagre blanco. Humedece un poco de algodón en la mezcla y ponla en tu oreja. En unos dos minutos, la cera desaparecerá por sí misma.
Quitaesmaltes de emergencia
Frota alcohol sobre tus uñas si no tienes acetona al alcance. Dañará tus uñas y te tomará mucho más tiempo, así que no lo hagas seguido, pero siempre te puede salvar de un apuro.
Termina con los herpes labiales
Aunque el 85% de la población porta el virus que lo causa, sólo una pequeña cantidad de ellas han experimentado alguna vez un de estos herpes. Si eres uno de los “afortunados”, aplica alcohol isopropílico al 70% sobre el área afectada para eliminar rápidamente la erupción de tu labio.
Acaba con los ácaros y los chinches de tu cama
Quizás no estén en tu cama, pero seguramente te los has pillado en la pieza de un hotel. Las chinches pueden volverse un verdadero dolor de cabeza. Pero añadiendo alcohol en un bote de spray y rociándolo por las sábanas y las almohadas, podrás deshacerte de ellas.
Repite el proceso un par de veces hasta asegurarte que desaparecieron por completo. Lo mismo sirve para evitar la acumulación de ácaros.
Quita los pelos encarnados
Es común que luego de pasar la máquina de afeitar por nuestras piernas, hay algunos vellos rebeldes que se niegan a crecer de la forma en que debieran. Así, terminamos con las piernas plagadas de puntos rojos y, en el peor de los casos, un poro lleno de pus consecuencia de la obstrucción de pelo.
El truco es que luego de usar la rasuradora, debes aplicarte un poco de alcohol en el área deseada. Así, evitarás que aparezcan pelos encarnados y tratarás cualquier irritación.
Desinfectante de manos
Podrás fabricar tu propio desinfectante de manos casero de manera muy fácil.
Necesitarás:
- 2 cucharadas de alcohol etílico (96°)
- 1/4 de taza de gel de aloe vera natural (cómprala en farmacias y droguerías)
- 1 cucharada de glicerina (consíguela en farmacias)
- 10 gotas de aceite esencial de limón o lavanda
Preparación:
Mezcla los ingredientes hasta que obtengas un gel bien integrado, luego ponlo en un bote con dispensador o en una botellita de viaje para usarlo cuando necesites lavarte las manos y no tengas acceso a agua y jabón. Aplica un poco de gel en la palma de tu mano y frota ambas manos hasta que se absorba.
