El mundo de la cocina es mucho más amplio de lo que podemos pensar, en las grandes escuelas de gastronomía se enseñan muchas técnicas y secretos que los cocineros profesionales guardan para compartir sólo con sus alumnos.
Sin embargo, se han podido averiguar algunos de sus conocimientos secretos, por ello queremos compartirlos para que puedas cocinar como todo un Gordon Ramsey o incluso mejor.
1. Un filete perfecto
Nunca pongas a freír la carne que recién has sacado del refrigerador. Déjala reposar durante 2 o 3 horas a una temperatura ambiente, esto hará que se derrita y al momento que la pongas a freír lo hará de una manera uniforme. Gracias a esto obtendremos un filete perfecto, sin importar el término de tu preferencia. Ahora bien, si deseas una corteza como la que se muestra en la imagen es necesario remojarla con una servilleta antes de freírla.
2. Una carne más jugosa
El pollo o la carne de cerdo tardan bastante en freír, pero son fáciles de resecar si no los dejamos el tiempo adecuado. Para evitarlo, los cocineros modernos utilizan un método muy astuto: remojar en salmuera. La receta es sencilla: en un litro de agua hay que añadir 1/4 de taza de sal y según su deseo puede ser 1/2 taza de azúcar. A continuación sumerge la carne y posteriormente colócala dentro del refrigerador.
El tiempo de reposo dependerá completamente del peso del producto. Por ejemplo, puedes dejarlo durante una hora si el producto pesa un kilo, pero no tiene que superar más de 8 horas. Asimismo, si se trata de pedacitos pequeños tales como muslos de pollo, entonces el tiempo se calcula basándose en el peso promedio de cada trozo. Antes de preparar, no olvides quitar el sobrante de la sal colocada en la carne.
3. Hierbas aromáticas y especias
Para que las especias tales como la pimienta negra o el comino den un sabor único al platillo, es necesario calentarlas en un sartén seco y luego triturarlas. Es mejor hacerlo en un mortero de piedra, ya que no perderá ni una gota del maravilloso aroma. Intenta reemplazar la pimienta molida por bolas, desmenúzala, agrégala al platillo y notarás que miles de matices se adquirirán al sabor acostumbrado.
4. Una suave cocción
Para preparar una masa ideal con mantequilla, sigue simplemente una sola regla: deja reposar la mantequilla y los huevos a una temperatura ambiente.
5. Un crujiente pescado frito
Para obtener un crujiente pescado frito que asarás en la parrilla, pon un poco de mayonesa al filete. Para hacerlo, toma una brocha de cocina, sumérgela en la mayonesa y con unos movimientos rápidos aplícala al pescado. A continuación sala la carne y cólocala sobre la parrilla sin miedo. Un crujiente pesacado frito está garantizado.
Algo más. Asalo con muy pocas especias, es mejor utilizar únicamente sal y al final salpicar con un poco de jugo de limón.
6. Un filete sin aceite
Alain Ducasse, uno de los más famosos cocineros del mundo, compartió su secreto para la preparación de un delicioso filete. Al freír, primero pon al sartén el pedazo de la carne que tiene la capa grasosa. No sólo hará la carne más rica, sino que también te evita la necesidad de usar cualquier otro tipo de aceite de cocina
7. Un puré de papa suave
Antes de convertir la papa cocida en puré, hay que secarla con cuidado. Para esto colócala en un sartén seco y caliente, mantenla hasta que se evapore el resto del agua. Es importante que el tubérculo no se fría. Y sólo después empieza a preparar el puré, así obtendrás un platillo exquisito y suave.
Un pequeño secreto: para que la leche no te salpique, antes de verter el líquido aplasta un poco las papas.
8. Una crema de verduras exquisita.
Antes de cocinar una crema de verduras, fríe por separado todas las verduras en aceite vegetal y solo después agrégalas al caldo o al agua. Eso dora el azúcar que contienen las verduras y revela su sabor y hará tu platillo más aromático. Por cierto, es la misma regla para preparar ragú vegetal.
9. Unas deliciosas crepas
Sin importar la receta, siempre agrega un par de cucharadas de tu crema favorita a la masa. Este truco funciona en todos los casos sin excepción. Como resultado obtendrás unas crepas dulces. Siempre salen mucho más suaves, deliciosas y al rellenarlas no se rompen.
10. El azúcar no es para endulzar
El azúcar, al igual que la sal, es un condimento para tu platillo. Agrega una pizca de azúcar a cualquier platillo que contenga tomate fresco, conservado o salsa de tomate. Esto le quitará un poco de la acidez natural que posee este ingrediente y te permitirá descubrir el verdadero sabor del platillo.
11. El platillo más complicado es un huevo estrellado.
Son tres los principales componentes para obtener un perfecto huevo estrellado: sartén grueso, mantequilla y una temperatura adecuada. Calienta un poco el sartén y ponle aproximadamente 1/2 cucharita de mantequilla. Esta tiene que derretirse lentamente. A continuación pon el huevo en el sartén y cocina de 4 a 5 minutos. Agrega un poco de sal y ¡listo! Puedes empezar a comerlo.
12. Un buen caldo
Tener un caldo transparente es uno de los principales elementos para la gran mayoría de las sopas, salsas y otros platillos. Para que el caldo sea cristalino, hay que cocinar el pollo de una manera especial. Debes hacerlo a fuego lento y sin tapa durante no menos de 3 horas, evitando que hierva y quitándole a tiempo la espuma cuando se acumule. Después de 1 hora y media de cocción, puedes añadir la raíz del perejil, apio, zanahoria y cebolla.
Pero al preparar el caldo de res o cordero, se pueden freír algunos tubérculos. Córtalos a la mitad y ponlos en un sartén seco y caliente hasta formar una corteza negra. Luego agrégalos al caldo, esto le dará color y un excelente sabor a tu platillo.
13. Una crujiente corteza
Al hornear pan casero, ocurren frecuentes dificultades con la corteza. A veces queda pálida o se vuelve tan dura como una piedra. La solución es fácil: coloca un traste con poca cantidad de agua al horno. El vapor hará su tarea, la corteza saldrá bonita, crujiente y al mismo tiempo blanda.
14. Freír correctamente la cebolla
Pon el sartén a fuego medio, caliéntalo y agrega mantequilla, aceite vegetal y la cebolla picada con sal. La sal ejecutará varias tareas: evitará el olor desagradable y ayudará a que la cebolla se prepare más rápido y se endulce. Se puede freír la cebolla solamente con mantequilla, pero para que no se haga oscura durante el proceso de calentamiento, utiliza mantequilla clarificada.
15. No le temas al ajo
No solo los vampiros temen al ajo. El olor que produce al salir de tu boca puede
destruir una reunión de negocios o una cita romántica. Si te gusta esta verdura, pero tienes miedo de asustar a la persona con la que planeas verte, no lo agregues al platillo, solamente unta el plato con ajo. La comida adquirirá su aroma y así podrás evitar el desagradable olor.
Consejo extra: di no a los sartenes antiadherentes.
¿Notaste que con los sartenes modernos es muy difícil preparar algún platillo con una verdadera corteza crujiente? Toda la culpa la tiene el recubrimiento antiadherente. Utiliza este tipo de sartén para preparar el huevo, el omelet o las crepas. Pero si necesitas pescado, carne o papa con una corteza apetitosa, compra un buen sartén sin recubrimiento antiadherente y siente la diferencia
¡Esperamos que utilices estos consejos!