El colesterol es una sustancia necesaria para el desarrollo del organismo, sin embargo, en exceso es dañino para la salud. Para reducirlo no siempre es necesario recurrir a medicamentos, ya que la naturaleza también nos brinda opciones y se pueden adaptar a cada persona de acuerdo a sus necesidades.
Ajo
El uso del ajo como medicina natural se remonta a las antiguas civilizaciones. En los últimos años se ha encontrado que ciertas sustancias pueden ser la razón de la actividad antiateroscleorótica del ajo, entre ellas se encuentran:
- El azufre
- La alicina
- El ajoeno
- La S-alilcisteína
- Entre otras
Estas sustancias tienen la capacidad para impedir el depósito de sustancias lipídicas en las paredes de las arterias. De hecho, se encontró que los niveles de colesterol más bajos correspondían a los individuos cuya ingesta de ajo era superior.
Los niveles de colesterol se elevan cuando el consumo de ajo es menor, aunque existen efectos secundarios como el fuerte olor o las molestias digestivas, el uso del ajo para bajar el colesterol ha resultado ser efectivo.
Té de cilantro
Las semillas de cilantro, además de emplearse en la cocina tradicional de varios países, también posee efectos medicinales, antimicrobianos, antifúngicos, antihipertensivos, entre otros. Estos pequeños elementos poseen propiedades hipolipidémias muy importantes. En diversos estudios se ha encontrado que las semillas de cilantro incrementan la degradación del colesterol.
Calienta un taza de agua con 2 cucharaditas de polvo de semillas de cilantro hasta que hierva. Cuando se haya enfriado, puedes filtrarlo y beberlo 1 o 2 veces al día.
Avena
Este alimento es rico en fibra dietética soluble. Aporta vitamina E, B, proteínas y ácido linoleico, entre otros nutrientes. De acuerdo a la FDA, este cereal resulta de gran ayuda para bajar el colesterol LDL en la sangre. Este debido a su contenido de fibra soluble, que interfiere en la absorción de grasas y colesterol, así como en la recaptación de los ácidos biliares.
La FDA recomienda el consumo de 10 a 25 gramos de avena o cereal de grano completo, por día. Puedes incluirlo en el desayuno, cruda o cocida. No solo sirve para bajar el colesterol malo, sino que también es eficaz para estabilizar los niveles de azúcar en la sangre, además de facilitar la digestión.
Almendras
Forma parte de los frutos secos, que poseen propiedades para bajar el colesterol malo, además de ayudar a proteger y fortalecer el sistema cardiovascular. En diversas investigaciones se ha encontrado que el consumo de almendras afecta de manera positiva a los lípidos y lipoproteínas. Esto se debe a su rico contenido de ácidos grasos insaturados, fibra, fitoesteroles, bajo contenido en ácidos grasos saturados, entre otros.
Las propiedades de los frutos secos regulan las enzimas relacionadas con la síntesis de colesterol y la producción de ácidos biliares. El consumo diario de almendras, en lugar de consumir un refrigerio alto en carbohidratos, previene el riesgo de padecer problemas cardiacos.
Arándanos
Esta bayas son conocidas por sus potentes propiedades antioxidantes, efecto que previene la oxidación del colesterol malo. El jugo de arándano tiene el potencial para bajar el colesterol total y sobre todo el LDL, además incrementa el colesterol bueno.
En diversas pruebas en las que se administró jugo de esta baya, tanto a hombres como mujeres, se concluyó que todos los efectos resultaron ser positivos a la hora de prevenir riesgos cardiovasculares. Es recomendable beber 3 vasos al día de jugo de arándano para incrementar los niveles de colesterol bueno. Además de ejercitarte y mantener un estilo de vida saludable.
