La glándula tiroides es la encargada de producir las hormonas necesarias para el metabolismo, por lo que es de suma importancia que evites los malos hábitos que la alteran.
Cuando las hormonas que produce la tiroides son deficientes, el organismo no funciona correctamente y no quema las calorías de manera normal. Por lo tanto, hay un ascenso de peso de manera involuntaria, es decir, se produce el hipotiroidismo. Las personas que lo padecen tienden a subir de peso, su piel se vuelve más seca, los latidos del corazón más lentos y puede existir estreñimiento, todo esto por causa de un metabolismo más lento, y por ende, ineficiente.
El proceso opuesto al anterior, cuando se produce una producción desmedida de la hormona tiroidea, provoca el hipertiroidismo. Es importante visitar a un médico si notas cambios en tu peso sin razón aparente, se te realizarán las pruebas para confirmas o descartar algún trastorno relacionado con la glándula tiroides.
Las alteraciones a esta glándula se deben principalmente a trastornos autoinmunes, problemas congénitos o al consumo de medicamentos, sin embargo, existen ciertos hábitos que pueden alterar su funcionamiento y afectar el metabolismo.
1 . Sedentarismo
El ejercicio diario es clave para mantener nuestro cuerpo sano, ya que el sedentarismo puede estar asociado a la presencia de trastornos hormonales, como el caso del hipotiroidismo.
La actividad física no es solo para mantener el peso adecuado, sino que además para prevenir muchas enfermedades o alteraciones de salud.
2. Cafeína
El consumo desmedido de cafeína puede estar asociado a la aparición de irregularidades con la glándula tiroides. Nada en exceso es saludable, por lo que si consumes cafeína en demasía, debes comenzar a dejarla de lado.
3. Alcohol
El alcohol es un posible causante de hipotiroidismo, por lo que hay que moderar su consumo o simplemente dejarlo de lado. Al igual que con el café, la ingesta de bebidas alcohólicas afecta al organismo en general.
4. Tabaquismo
El tabaco provoca un sinfín de enfermedades y además puede causar un mal funcionamiento de tu glándula tiroides.
5. Yodo
Este elemento es indispensable para el buen funcionamiento de la glándula tiroides y se pueden causar alteraciones si el aporte de yodo es insuficiente.
Puedes encontrar yodo en pescados, mariscos, ajos, frijoles blancos, yogures, quesos, leche de vaca, algas marinas, naranjas, manzanas, remolacha, acelga, cebollas, piña, entre otros.
Es importante incluir este mineral en tu dieta, pero cuidado con hace un abuso de él, para ello consulta a un nutricionista, quien podrás guiarte hacia una alimentación balanceada y saludable.
Sigue estos hábitos y podrás notar cómo tu organismo completo se ve beneficiado, no solo tu tiroides. Ten en cuenta que lo que haces hoy repercute mañana y todo el daño acumulado, a la larga, podría provocar algún trastorno en tu cuerpo.