Para conseguir un cabello suave, saludable y brillante es necesario incluir tratamientos sencillos pero regulares en nuestra rutina habitual de cuidado capilar.
Siguiendo estos consejos podrás conseguir ese cabello soñado que tanto quieres.
1 . Adiós toallas
No es recomendable peinar el cabello justo después del lavo, ya que daña las cerdas y hace que el celo se vuelva quebradizo y esponjoso al secarse.
Este es el mismo efecto que se consigue al frotar el cabello con una toalla luego de lavarlo. Es mejor secarlo con un tejido de estructura suave que absorba la humedad, una buena opción es hacerlo con una camiseta de algodón.
2. Usa productos adecuados para el cuidado capilar
El acondicionador permite que las puntas se cierren mejor y las mascarillas aportan nutrición. Los siguientes aceites te ayudarán a conseguir un cabello liso:
- Jojoba: restaura la estructura del cabello dañado
- Coco: hidrata y aporta brillo
- Ylang-ylang: efecto alisador
- Romero: hidrata y favorece el crecimiento del cabello
- Brócoli: silicona natural
- Argán: Aporta brillo
- Manteca de karité: Añade brillo y protege contra la radiación ultravioleta
- Bardana: Restaura la estructura del cabello dañado, acelera el crecimiento y previene que el cuero cabelludo se reseque
- Ricino: estimula el crecimiento de cabello y previene la caída
Antes de aplicar el aceite debes probarlo en la parte inferior del codo para asegurarte de no tener ninguna reacción alérgica.
También puedes agregar el uso de suero alisador sobre el cabello mojado. Pero es importante que tu cabello no se acostumbre a los poductos que utilices, ya que de lo contrario reduce significativamente el impacto positivo. Cuando pases 2 semanas usando lo mismo cada dos días, tu cabello se acostumbrará, es mejor comprar 2 juegos de productos de cuidado y alternarlos.
3. Cepilla tu cabello antes de dormir usando aceites esenciales
Si realizas este procedimiento regularmente, podrás mejorar significativamente la apariencia y salud de tu cabello. Una gota de aceite será suficiente para cabello graso, pero si lo tienes seco deberás usar hasta 3 gotas.
Los aceites de limón, bergamota, árbol de té, verbena y enebro son los mejores para el cabello graso. Mientras que para el cabello seco y normal, lo mejor será aceite de lavanda, ylang-ylang, naranja y verbena.
4. Usa correctamente el secador de pelo
No uses el secador cuando tu pelo esté muy mojado, ya que si tienes gotas de agua durante el secado, estas comenzarán a calentarse, destruyendo la estructura del cabello.
Divide tu cabello por zonas y trabaja en cada una de ellas por turnos.
Dirige la corriente de aire de arriba hacia abajo, para que las hebras se alisen y el cabello quede suave.
5. Usa peines adecuados
Si quieres que tu cabello esté liso, usa peines de madera, ya que son capaces de peinar fácilmente los rizos sin electrificarlos ni dañar su estructura. Los peines de silicona tienen un efecto similar.
Los cepillos con un pequeño espacio entre los dientes son útiles para distribuir mascarillas y aceites, mientras que los cepillos voluminosos son prácticos para peinar y prevenir el enredo del pelo.
6. Aplícate mascarillas de aceite
Las mascarillas calientes son consideradas más eficaces y también se pueden realzar en casa. Aplica una mezcla de aceites ligeramente caliente sobre tu cabeza, envuélvela con una toalla y ponte encima un gorro de ducha plástico. Deja que actúe entre 30 y 60 minutos, y luego lava con champú.
Las bases más eficaces para las mascarillas son:
- Cabello graso: Aceite de coco y almendras
- Cabello seco: Aceite de aguacate, sésamo y bardana
- Cabello normal: Aceite de oliva y linaza.
Con el uso frecuente de los aceites puede que se quite más rápido el tinte de tu cabello, si es que lo tiñes, mientras que el de bardana puede hacer que el pelo rubio se oscurezca ligeramente.
7. Protege tu cabello en verano e invierno
Los rayos UV pueden dañar tu cabello tanto en verano como en invierno, por eso es importante mantenerlo alejado de ese impacto negativo.
De lo contrario, perderá brillo y se volverá quebradizo. En verano puedes usar sombreros y aplicar productos de protección térmica a tu cabello.
8. Prueba algún tratamiento protector de cabello
El tratamiento de protección (shining), es ideal para sanar el cabello. Se trata de una composición nutritiva e incolora que hidrata y nutre profundamente el cabello, y lo mejor de todo es que el efecto puede durar hasta un mes.
Es frecuente realizar este tratamiento en un salón de belleza, pero también se puede llevar a cabo en casa, incluso luego de teñir tu pelo.