Lograr un vientre plano requiere de tres claves básica: constancia, ejercicio y una correcta alimentación. Por lo mismo no se consigue de un día para otro, deberán pasar algunas semanas o meses para comenzar a percibir menos volumen y más firmeza, menos flacidez y unas tallas menos.
Pero más allá de la apariencia física, es importante entender que el volumen de nuestro abdomen también tiene que ver con la salud de nuestro organismo. Un abdomen abultado se asocia con un mayor riesgo de padecer determinados problemas cardiovasculares.
Para conseguirlo nada mejor que cuidar la dieta y estos son los alimentos ideales para incluir en tus cenas, que te ayudarán a conseguir un vientre plano.
1. Verduras de hojas verdes
Lo más rápido para conseguir un vientre más plano es consumir cada día verduras de hoja verde. Pero debemos escoger aquellas verduras que no eviten digestiones pesadas y que nos permitan tener un sueño relajado.
Las mejores verduras son la col rizada, la espinaca y la lechuga romana. Pero si son pesadas, puedes cocinarlas al vapor. Así conservarán buena parte de sus propiedades y además facilitarán un buen descanso, en especial si consumes un poco de lechuga en tu cena.
2. Aceite de oliva
No dejes de lado el consumo del aceite de oliva para conseguir un vientre plano. Los ácidos grasos del aceite de oliva virgen extra como el ácido oleico, nos pueden ayudar a favorecer la descomposición de las grasas más resistentes de nuestro cuerpo, en especial las del abdomen. Puedes aderezar tus ensaladas con aceite de oliva.
3. Una infusión de menta
Antes de irte a la cama, puedes hacer una infusión de menta, ya que además de actuar como relajante muscular, la menta nos ayuda a depurar el organismo, es un antiinflamatorio muy potente y un aliado fabuloso para nuestra salud hepática.
Puedes tomar hasta dos tazas de infusión de menta al día. El mejor momento para favorecer tu bienestar y la pérdida de peso es por la noche, por ser un mediador de nuestro hígado y sus funciones.
4. Algas quelpo o kelp
Son apreciadas por sus altos niveles de yodo y por regular nuestra tasa metabólica, la velocidad a la que el cuerpo quema grasas.
Son ricas en múltiples vitaminas, ideales todas ellas para favorecer la descomposición de la grasa del vientre y aliviar la retención de agua.
5. Los espárragos
Están llenos de vitaminas A, del complejo B, C y E, y minerales como cinc y potasio, muy necesarios para favorecer la eliminación del exceso de líquidos de nuestro cuerpo.
6. Los tomates
Están llenos de antioxidantes y nos ayudan a perder peso ya que combaten la inflamación y la retención de agua en el cuerpo. Gracias a la leptina, un tipo de proteína presente en el tomate, regulamos el metabolismo y nos sentimos saciados.
7. Sandías
Además de contener agua, son muy ricas en potasio, un mineral esencial para la adecuada eliminación del exceso de líquidos en nuestro organismo. Además son ricas en vitamina C con lo cual, cuida el sistema inmunitario y combate la inflación.
8. Pepinos
Son un miembro más de la familia de las sandía y los melones, por lo tanto comparten las mismas propiedades adelgazantes. Son saciantes, diuréticos y vitamínicos.
9. Alcachofas
Son ricas en fibra, combaten la hinchazón en el abdomen, contienen pocas calorías, son nutritivas y digestivas. Son también hortalizas que favorecen la salud hepática.
Todo alimento que cuide el hígado es perfecto para las cenas, porque durante la noche este órgano lleva a cabo importantes tareas de desintoxicación.
Recuerda que es importante combinar una alimentación sana, variada y equilibrada con rutinas de ejercicios.
