Si bien esta dupla es milagrosa, no podemos olvidar que aparte de aplicarlos a diario para mejorar el aspecto de las várices y las arañitas vasculares, es primordial que cuidemos nuestra alimentación y hagamos ejercicios específicos para las piernas.
Las várices y las arañitas son las señales más visibles de un problema circulatorio que se desarrolla en la parte inferior del cuerpo.
Se generan cuando los capilares y las venas se dilatan, ya sea por una condición inflamatoria o por la acumulación anormal de sangre debido a la debilidad en las paredes y válvulas. Están consideradas como un problema estético que afecta la imagen de la mujer y, aunque en menor medida, también al hombre.
Las várices o arañitas tienen un aspecto abultado y tienden a darse en áreas visibles como las pantorrillas y la cara interna de los muslos. Si bien son más comunes a partir de los 50 años o durante el embarazo, existen algunos factores que pueden provocar su aparición en personas jóvenes.
Lo mejor de todo es que existe una amplia variedad de tratamientos y productos cosméticos cuyos efectos disminuyen su tamaño a la vez que mejoran la salud circulatoria.
En esta artículo podrás encontrar un tratamiento natural a base de aceite de oliva y ajo que otorga importantes nutrientes para aliviar la inflamación y las dificultades de la circulación.
Esta gran dupla da como resultado una loción de textura oleosa que, combinada con un poco de jugo de limón, reduce de forma notable la presencia de várices y arañitas. Algunos de los beneficios de esta mezcla son:
Efecto antiinflamatorio
Reafirmante
Tonificante
Promueve la circulación
Activa el sistema linfático
Impulsa la eliminación de las toxinas que impiden la oxigenación de las células.
Calma y disminuye la tensión y el dolor.
Como complemento, puede mejorar los efectos de la alimentación.
Recomendamos iniciar su uso tan pronto como se note la primera vena anormal, dado que cuanto más rápido se atiendan más fácil es eliminarlas.
Debemos aclarar que los resultados no se obtienen desde la primera aplicación y es necesario ser constantes con su uso para obtenerlos en la forma que esperamos.
PREPARACIÓN
No olvides buscar los ingredientes de mejor calidad, ya que los económicos no cuentan con las mismas propiedades.
Elige aceite de oliva extra virgen y ajos enteros para cerciorarte de que sus propiedades en el tratamiento sean efectivas.
Ingredientes:
12 dientes de ajo
Aceite de oliva extra virgen (100 g)
El zumo de un limón
Un frasco de vidrio
Preparación
Pelar los dientes de ajo, cortarlos por la mitad y triturarlos, con la ayuda de un mortero, hasta conseguir una pasta.
Incorporar el ajo triturado en el frasco y, en seguida, añadir el aceite de oliva y el jugo de limón.
Tapar el recipiente y ponerlo en un lugar fresco y oscuro, toda la noche.
A la mañana siguiente, remover e los ingredientes con un utensilio de madera y colarlos para separar los restos de ajo.
Modo de uso
Frotar el producto con suaves masajes circulares sobre las áreas del cuerpo afectadas por las várices y arañitas.
Realizar movimientos continuos y presionar con las yemas de los dedos para estimular la circulación.
Dejar que actúe y se absorba durante una hora y, pasado este tiempo, enjuagar con agua fría.
Repetir su aplicación como mínimo tres veces a la semana, de preferencia por la noche.
IMPORTANTE: no olvides combinar el uso de este producto natural con la práctica diaria de ejercicios y una dieta equilibrada.
Estos hábitos no sólo mejoran la salud circulatoria, sino que disminuyen el exceso de peso y la inflamación, dos factores que afectan la salud de las piernas. No dejes pasar la oportunidad de poner en práctica ese útil método y dile adiós a las arañitas o várices.