Aunque no lo creas, los primeros en descubrir las propiedades de esta planta, a la que llamaron la “planta de la inmortalidad”, fueron los egipcios y, es gracias a ellos que hoy todos podemos conocer los muchos milagros del Aloe Vera.

Pero para esto, es necesario saber cómo aplicarlo o usarlo para obtener todos sus beneficios, es por esto que hoy te contamos sobre las maravillosas propiedades de esta plana y cómo realizar los tratamientos, que son muy simples y sencillos.

Comencemos con un poco de historia

Para empezar, conozcamos algo de su historia y origen. Al Aloe Vera, se le considera una planta milenaria, ya que los primeros registros de esta, datan desde hace milenios atrás. Es originaria del norte y este de África, su nombre “aloe vera” significa amargo en árabe. Y, los primeros datos que se han obtenido de esta planta, provienen de los egipcios, desde hace más de 5000 años, donde también existen representaciones pictóricas de esta planta sobre tumbas y también monumentos, hasta en algunos papiros.

Esta antigua civilización, eran los sacerdotes y alquimistas los que sabían cómo utilizar los beneficios de esta planta y los usaban también, con diferentes objetivos, como tratamientos cosméticos, espirituales y hasta medicinales:

• Se sabe que Cleopatra lo utilizaba como humectante
• Era uno de los ingredientes principales a momento de embalsamar faraones
• Se colgaba dentro de las casas como amuleto de protección
• Se le regalaba a los novios para ayudar a la fertilidad
• También era entregado en cada nuevo comercio u hogar como símbolo de buena fortuna
• Lo aplicaban sobre lesiones y quemaduras para una buena cicatrización.
• Consumían su extracto, como tratamiento para problemas digestivos (indigestión, diarrea, vómito, etc.)

Pasado unos años o siglos, fueron los árabes los que ingresaron esta planta en Europa y ayudaron a expandirla. Pronto, los milagros del aloe vera fueron conociéndose a gran escala y fue entonces, donde comenzó el mercado de este producto, donde el gel se extraía por medio de prensas y luego se sellaba en bolsas de piel de cabra y las dejaban secar al sol.

Los milagros del aloe vera y sus múltiples propiedades

Si alguna vez has visto una hoja de aloe vera, debes saber que esta consta de dos partes principales. Por un lado, está la corteza verde y dura, que recubre toda la hoja y, por otro lado, está el gel. Sin embargo, existen otras partes de la planta que son muy beneficiosas, como el alcíbar de aloe, que se trata de un líquido amarillento que se presenta en la base de la penca y su sabor es muy desagradable con un amargor severo, pero hay personas que pueden preparar medicinas muy poderosas con este ingrediente, esto pues contiene un alto porcentaje de antraquionas (compuesto orgánico) que estimulan y ayudan a promover una buena salud gastrointestinal.

El gel del aloe, que es la parte que más se utiliza, está compuesta de enzimas, minerales y muchos polisacáridos, que son muy beneficiosos para nuestro cuerpo, aportando así:

• Minerales: calcio, magnesio, potasio, zinc, fósforo, hierro, aluminio y manganeso.
• Ácidos: glutamínico, linoleico, mirístico, oleico, fórmico, aspártico y palmítico.
• Vitaminas: A, E, C, ácido fólico, niacina, tiamina y riboflavina
• Fitoesteroles
• Taninos
• Un aminoácido denominado arginina
• Carbohidratos: fructosa, glucosa, manosa acetilada, arabinosa y galactosa.

¿Para qué podemos utilizar el aloe vera?

Para combatir la acidez estomacal

Ha quedado muy claro con el paso de los años, que los beneficios del aloe vera, en cuanto a los problemas gastrointestinales, son indiscutibles. Posee una enorme cantidad de propiedades antiulcéricas, gracias a los poliscáridos que posee, y estos se encargan de recubrir las mucosas gástricas, evitando el daño en las paredes del estómago. Lo que también resulta eficaz en contra de la acidez, la hernia de hiato, el reflujo, la gastritis y la inflamación.

Es más, recientemente se ha demostrado su efecto para evitar la proliferación de la bacteria Helicobacter pylori, el microorganismo causante de la gastritis crónica.

Para combatir estos síntomas, debes agregar una cucharada de gel de aloe, en un vaso con agua y beber.

Tratar problemas intestinales

Gracias a las propiedades de esta planta, también es muy útil para disminuir la irritación de todas las enfermedades intestinales y con ella, también el dolor. Esto, debido a que también es un antiinflamatorio natural, que combate cólicos y malestares en general. Su uso, de acuerdo a algunas investigaciones, dependen de la gravedad de los problemas del paciente, sin embargo se debe consumir entre 75 a 150 ml de gel de aloe, diariamente para tratar estas afecciones:

• colitis ulcerosa
• enfermedad inflamatoria intestinal
• colon irritable
• intestino permeable
• enfermedad de Crohn

Las dosis, puedes dividirlas en tres tomas, pero debes saber que ante un nuevo brote de la enfermedad o un gran avance de la misma, el aloe vera pierde mayor efecto por lo que el paciente necesitará un tratamiento más específico.

Para reforzar el sistema inmune

Esta es una planta rica en “manosa acetilada”, la que ejerce su efecto directamente sobre el sistema inmune. Por lo que, consumir aloe promueve el desarrollo y fortalecimiento de las defensas de tu organismo.

Para prevenir y combatir el cáncer

Otro de los milagros de esta planta, se deben a su potencial para prevenir y combatir el cáncer. Esto debido a los antioxidantes como la vitamina E, el beta sitosterol, betacarotenos, vitamina C, zinc, entre otros, que tienen propiedades anticancerígenas. Actúa, especialmente, contra el cáncer de mama, estómago, próstata y pulmón.

Cuidar tu piel

El aloe vera es genial para la piel, esto debido a que es un poderoso antiséptico, bactericida, antiinflamatorio, humectante y regenerador celular. Por esto, no dudes aplicarlo sobre tu piel:

• Si necesitas curar una alguna cortadura o lesión
• Si necesitas cicatrizar una herida leve o mejorar el aspecto de una cicatriz. Para esto, solo colocar un trozo de gel de aloe sobre la herida.  Por ello, el sangrado se detiene y promueve la cicatrización rápida (sólo de lesiones menores). Lo mejor, es que a su vez, desinfecta e impide que gérmenes infecten la herida.
• Para detener los síntomas de picaduras de diferentes insectos. Con un trocito de gel de aloe, puedse mejorar erupciones, ardores, picazón, dolor, inflamación y refrescar la zona.
• Ante cualquier tipo de quemadura, para una rápida recuperación y cicatrización
• Para la psoriasis
• Para los herpes
• Para curar orzuelos
• Para aliviar los síntomas de las anginas. Para ello, solo deberás hacer gárgaras con un trozo de aloe diluido en agua.
• Para aliviar los síntomas de las hemorroides y combatirlas, a través de un tratamiento regular
• También es un poderoso astringente que limpia el cutis y lo deja renovado
• Para humectar la piel después de la depilación
• Es un tratamiento efectivo contra el acné