Las bolas de fraile -también llamadas suspiro de monja, cremitas berlines o berlinesas- son una clase de bollo que se hace frito en lugar de al horno. El resultado es una masa esponjosa y muy sabrosa, ideal para bebidas o infusiones como el mate.
El origen exacto de las bolas de fraile es impreciso, pero el nombre bolas de fraile o berlinesas se originó en Argentina, gracias a un grupo de panaderos anarquistas de fines del siglo XIX, cuya filosofía político-social estaba en contra de instituciones como la Iglesia.
El sospechoso más común en cuanto al origen de las berlinesas es Alemania. Se cree que nacieron en 1976 de la mano de un conocido pastelero, llamado Federico el Grande.
A continuación te contamos cómo preparar esta deliciosa receta, ideal para el desayuno o la merienda. Es de dificultad media y su realización no te tomará más de 90 minutos.
Ingredientes (para 6 personas)
- 500 gramos de harina de repostería, leudante
- 100 gramos de azúcar
- 100 gramos de manteca o mantequilla
- 80 centímetros cúbicos de leche
- 30 gramos de levadura en polvo
- 2 huevos
- Aceite para freír
- Dulce de leche
Preparación
Disuelve la levadura en la leche tibia y déjala unos 20 minutos (dependiendo de la temperatura ambiente) hasta que espume.
Aparte, mezcla los dos huevos, el azúcar y la manteca a punto de pomada usando varillas eléctricas, para hacer la masa más rápido.
Luego de que esté bien integrada esa mezcla, añade la levadura disuelta en leche y continúa batiendo.
Ahora agrega la harina tamizada (para evitar grumos y que la masa quede más suave y esponjosa), y comienza a amasar.
Luego de que esté lista la masa, forma una bola con ella y déjala reposar para que aumente su volumen.
Tomará alrededor de una hora que la masa doble su volumen, lo que es importante para que las bolas de fraile queden perfectas.
Luego de que esté listo el primer leudado, forma las bolas de fraile de forma que cada una pese alrededor de 30 gramos. Ponlas sobre una bandeja con harina espolvoreada o forrada con papel de horno para que no se peguen. Déjalas con cierta separación entre ellas, pues volverán a aumentar su volumen luego de un segundo leudado que tomará entre 25 y 30 minutos.
Luego del segundo leudado, fríe las bolas de fraile en una olla con aceite caliente abundante. Procura girarlas para que se doren de forma pareja.
También las puedes hacer al horno, con una temperatura de 180 °C.
Luego de que estén doradas, retíralas y resérvalas sobre papel absorbente, para quitar los excesos de grasa. Después deberás hacerles un corte al centro de cada una para rellenarlas con dulce del leche o con crema pastelera, según gustes.
Para terminar, espolvorea azúcar común o azúcar flor encima y disfruta esta exquisita receta.