Si presentas los síntomas que te presentamos, lo mejor es que acudas a un especialista para verificar si padeces de reflujo y así obtener un tratamiento adecuado para ello.
El reflujo ácido o gastroesofágico se produce cuando el contenido del estómago que tiene que ver con alimentos y ácidos gástricos suben por el esófago hasta tu boca.
A veces no llega a la boca pero suele recorrer unos 40 centímetros del esófago y produce ardor, acidez y quemazón.
Este reflujo ácido suele presentarse al inclinarnos o acostarnos tras comer demasiado o ingerir alimentos muy grasosos.
Se presenta mayormente en la noche cuando nos acostamos a descansar.
Si presentas este problema debes dormir con cierta inclinación de la cabeza, pero no de forma horizontal.
Hay otros síntomas que también se asocian al reflujo ácido y aquí te contamos sobre ello.
Aumento de la salivación
Este exceso de salivación puede presentarse mientras comes.
Sentirás una cantidad mayor de saliva en tu boca.
Esto se produce porque las glándulas salivales se preparan para digerir de mejor forma lo que consumes.
Neumonía
Este es uno de los síntomas menos esperados del reflujo ácido.
cuando los ácidos viajan por el esófago no sólo irritan esa zona, sino que pueden llegar a los pulmones tal como lo indica un estudio realizado por la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Al ocurrir esto puedes presentar una infección y tener neumonía por reflujo ácido.
Dolor en el pecho
Este síntoma suele asociarse con un ataque cardiaco, pero en muchos casos el dolor en el pecho se debe a la acidez y aunque no es grave, deberías consultar a un especialista.
Sabor amargo en tu boca
Al subir los ácidos gástricos por tu esófago, pueden dejar un sabor amargo en tu garganta.
El sabor puede quedarse por varias horas y afectará la degustación de los alimentos.
También hay quienes tienen este problema por falta de higiene bucal o problemas al hígado.
Ronquidos y problemas respiratorios al descansar
Según este estudio del Hospital Universitario Ramón y Cajal (Madrid), los problemas respiratorios a la hora de dormir pueden deberse al reflujo ácido que al subir desde el estómago provoca una especie de silbido.
Los ácidos pueden afectar las vías respiratorias y ocasionar irritación o infección.
Puedes presentar tos y ahogo por la noche.
Problemas para digerir alimentos
Si un reflujo no se trata a tiempo, los ácidos gástricos pueden dejar cicatrices y quemaduras en tu esófago lo que puede desencadenar que tengas sensaciones molestas al comer.
Puedes sentir arañazos al comer y tener problemas con los alimentos ácidos o muy picantes.
Por lo anterior, es importante que trates tu reflujo ácido cuanto antes.
Acidez gástrica
Al subir los ácidos por el esófago se puede producir esto y variar su intensidad de leve a un malestar mayor que incluso conlleve dolor intenso en el pecho.
Regurgitación
Al subir los ácidos pueden provocar vómitos que si son frecuentes pueden erosionar el esmalte de los dientes y generar problemas dentales.
Dispepsia
La dispepsia es la indigestión que se acompaña de un malestar en la parte alta del estómago y que puede ser dolorosa y estar presente como un síntoma del reflujo lo que puede hacer que sientas:
- Hinchazón.
- Sensación de estar demasiado lleno.
- Dolor de estómago.
- Eructos.
Si presentas estos síntomas, lo mejor es que acudas a tu médico para evitar complicaciones que pueden desembocar en úlceras o cáncer.
Tos seca
Puedes sentir un bulto en tu garganta que hará que tengas necesidad de toser o aclarar frecuentemente tu garganta.
Mantente atento a los síntomas del reflujo ácido
Si reconoces uno o más síntomas, busca ayuda de un especialista que te haga exámenes adecuados.
Al tener un diagnóstico el tratamiento es sencillo y deberás cambiar algunos hábitos o ajustar tu dieta eliminando o agregando alimentos.