“Trabajar con las manos en mi hogar me da mucha satisfacción, mucha más comparada con cualquier otro trabajo que haya tenido antes” dice Cynthia Loewen, una canadiense de 27 años que dejó su carrera de medicina.
Cynthia es oriunda de LaSalle en Montreal, Canadá. Ella dejó su trabajo de modelo y su carrera para ser médico para tener una vida de esposa y dueña de casa. Ahora ella se dedica a realizar las tareas del hogar.
Tras casarse con un ex militar, Cynthia decidió unirse al movimiento TradWife para ser una esposa “tradicional” que realiza las labores domésticas mientras su esposo trabaja.
“Mi marido es quien gana el pan y yo estoy a cargo de la casa. Trabajar con las manos en mi hogar me da mucha satisfacción, mucha más comparada con cualquier otro trabajo que haya tenido antes”.
—Cynthia Loewen en su canal de YouTube—
Es su marido quien toma las decisiones del hogar, aunque ella se define como “terca”, pero cree que lo anterior ha fortalecido el vínculo de esposa y esposo.
Cynthia comienza su rutina yendo al gimnasio, luego pasea al perro y después comienza a realizar los quehaceres del hogar, pero no sin antes maquillarse y vestirse. Durante el día cocina y hornea y explora hobbies como el vlogging o ser tutora de niños.
Cuando tiene la cena lista, Cynthia espera a su marido para cenar juntos y luego irse a dormir. Si su marido llega tarde, ella le deja la comida servida y tapada antes de irse a la cama.
“Mientras más veas las labores del hogar como un trabajo, más gratificantes serán los resultados, tal como en cualquier otro trabajo o carrera, siempre quieres tener metas”.
—Cynthia Loewen en su canal de YouTube—