Deliciosos Desayunos Con Chía Y Avena

El desayuno es una de las comidas más importantes del día, debe ser de calidad para poder comenzar la jornada con toda la energía que nuestro organismo requiere y jamás hay que dejarlo pasar por excusas como el poco tiempo, la falta de hambre o que nos ayudará a perder peso.

Por eso es importante incorporar las semillas de chía y la avena, las cuales se pueden dejar preparadas el día anterior y así será mucho más fácil nutrirse durante la mañana.

Estos ingredientes contienen los nutrientes necesarios para aumentar la energía y mejorar el metabolismo, además nos ayudan a adelgazar, ya que prolonga la sensación de saciedad, es bajo en caloría y mejora la digestión.

Beneficios de las semillas de chía

Estas semillas son consideradas un superalimento, gracias a su alto contenido de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Al consumirlas habitualmente estimulamos la principales funciones que participan en la eliminación del exceso de grasa, además de generarnos una gran sensación de saciedad.

Son ricas en ácidos grasos omega 3 y 6, además de contener el doble de proteínas que otras semillas. Mejoran el rendimiento físico y mental, disminuyen los niveles de azúcar en la sangre, controlan los niveles de colesterol, estimulan la depuración del organismo y combaten el estreñimiento.

Beneficios de la avena

La avena contiene fibra soluble, beta-glucanos y polifenoles que estimulan la depuración natural del organismo. La fibra ayuda a controlar los niveles de colesterol y la acumulación de desechos en el colon, además de activar el movimiento intestinal y evitar el estreñimiento.

Es un alimento altamente saciante y enérgico.

Receta de desayuno de semillas de chía y avena

Ingredientes

  • 1 1/2 vaso de leche semidescremada
  • 1 cucharada de miel
  • 4 cucharadas de semillas de chía
  • 2 cucharadas de copos de avena
  • 1/2 plátano

Preparación

  1. Mezcla la leche y la miel en un recipiente.
  2. Agrega las semillas de chía y la avena
  3. Revuelve para que todo quede integrado y tápalo.
  4. Llévalo al refrigerados por 60 minutos y luego vuelve a mezclar.
  5. La preparación habrá espesado, ya que las semillas absorben el agua y forman un gel.
  6. Tápalo nuevamente y guárdalo en el refrigerador hasta la mañana siguiente.

Puedes dividir la mezcla en dos porciones, agregarle pequeñas rodajas de plátano y preparar un saludable y enérgico desayuno. También puedes consumirlo como postre o merienda.

Si no consumes leche de vaca, puedes reemplazarla por una de origen vegetal o jugo de naranja.