Los alimentos orgánicos son aquellos que se crean a través de un proceso saludable sin afectar la medio ambiente, de esto bastante sabe Dinamarca, país que durante los últimos 25 años ha trabajado arduamente para convertirse en el primer país del mundo 100% orgánico.
Todo se ha logrado gracias a subsidios que han entregado a pequeños agricultores y al duplicar la producción en los cultivos orgánicos, sitios en donde se lleva a cabo una producción libre de agrotóxicos, lo cual preserva la calidad de los alimentos.
Uno de sus proyectos consiste en permitir a las personas crear huertos en terrenos abandonados, además el 60% de los alimentos se destinarán a hospitales, escuelas y restaurantes comunitarios.
La gran ventaja de la comida orgánica es que no contiene pesticidas, preservantes ni hormonas, además es rica en grasas saludables, todo esto es muy bien recibido por nuestro cuerpo y evita una gran cantidad de enfermedades, así como también ayuda a que nuestro organismo absorba con mayor facilidad los nutrientes.
En el país no existe una empresa gigante que acapare todo este mercado, de hecho por medio de los subsidios que reciben los agricultores, la competencia se enfoca más en las pequeñas y medianas empresas.
Todo este sistema favorece tanto al medio ambiene como al consumidor final del producto.
El gobierno danés está convirtiendo a su nación pionera en este tema, algo que todos los países debiesen considerar para crear una sociedad más sana y libre, alejados de las mega empresas que solo buscan aumentar sus ventas a costa de alimentos de baja calidad.