Con esta fácil receta podrás comer un exquisito bizcocho de manzana muy jugoso y esponjoso en menos de una hora y media. Esta es una delicia que resulta perfecta para acompañar un desayuno, una merienda o un café. Las manzanas que incluye le dan un toque esponjoso y húmedo, y que agradarán a la absoluta mayoría de la gente porque ¡quién no ama las manzanas!
Estos bizcochos son apropiados para cualquier temporada del año, y puedes cambiar la fruta por una de la estación o alguna de tus favoritas. Usa manzanas maduras para esta receta, para que así entreguen dulzor y jugosidad al bizcocho sin tener que usar mucha azúcar.
Ingredientes (para 6 personas)
- 250 gramos de harina de repostería
- 250 gramos de azúcar moreno o blanquilla
- 160 ml de aceite de girasol
- 3 huevos
- 2 manzanas
- 1 sobre de levadura
- 5 cucharadas soperas de mermeladas de melocotón
- 1 cucharada sopera de azúcar
Preparación
Pon el horno a calentar a 180 °C con calor arriba y abajo.
Añade los huevos y los 250 gramos de azúcar en un bol, bate hasta que la mezcla doble su volumen y reserva el resto del azúcar.
Agrega al bol el aceite de girasol y mezcla bien.
Procura tamizar la harina y la levadura con un colador o tamizador, y mézclala bien. Añádela a la masa anterior de a poco, hasta que se integre bien.
Pela las manzanas y corta la primera en rodajas finas, y ralla la otra. Agrega esta última a la mesa y mezcla bien.
Unta con mantequilla un molde redondo y alargado, y espolvoréalo con harina para que puedas desmoldar más fácil. Luego añade toda la masa al molde, y pon encima las rodajas de manzana. Espolvorea las cucharadas de azúcar en toda la base del bizcocho de manzana.
Pon el bizcocho al horno y cocínalo entre 30 y 40 minutos, o hasta que esté listo. Procura pinchar en el centro del bizcocho con un palillo alrededor de los 30 minutos, y si sale seco entonces está listo. Si no, déjalo un rato más.
Si el bizcocho no está listo aún pero está muy dorado, puedes poner un trozo de papel de aluminio por encima para evitar que se queme.
Una vez esté listo, sácalo del horno y déjalo enfriar. Disuelve 2 cucharadas de mermelada de melocotón en 3 a 4 cucharadas de agua y calienta la mezcla. Úsala para pintar la base de la tarta y que así tenga brillo.
¡Y ya está listo para comer!
