Cada año, un estimado de 100 mil millones de bolsas plásticas son usadas por los consumidores. Esto significa casi una bolsa de plástico por persona cada día, según dicen las cifras de Earth Policy Institute. Pero más allá de que puedan ser útiles para trasladar cosas por un lapso breve, la gran mayoría termina ensuciando nuestras calles y contaminando los océanos, con el consecuente daño al medioambiente.
Es por eso que hoy existen políticas a nivel mundial que tratan de evitar su consumo.
Pero todavía existen negocios que operan con bolsas plásticas, por lo que esta clase de contaminación está lejos de acabarse. Pero por suerte, existen ideas geniales que buscan proteger el planeta utilizándolas de maneras creativas.
Estos estudiantes de secundaria norteamericanos buscaron una forma brillante para reutilizar las bolsas de plástico.
Luego de ver que las personas sin hogar dormían en el suelo y sin colchones ni aislantes del frío, decidieron crear unos colchones a base de bolsas plásticas.
Fue así como estos alumnos de la escuela Hatboro-Horsham de Pensivania empezaron a reunirse varias veces a la semana para hacer hilos que retuercen y atan a otros para formar colchones para personas en situación de calle.
Usando bolsas donadas por la gente, con sus habilidades logran crear un colchón de 180 centímetros de largo ideal para brindarles calidez y comodidad a personas que duermen sin un techo.
Además, sus creaciones son resistentes al agua y sirven para alejar a los insectos.
Un solo tapete necesita entre 500 y 700 bolsas para ser acabado, lo que les toma bastante tiempo. Pero esto no le importa a estos estudiantes de buen corazón, pues les encanta ayudar a las personas sin hogar mientras protegen el planeta.