Un hijo se vuelve nuestro orgullo cuando nace y cada gesto que hace nos parece tan tierno o gracioso que queremos verlo repetirlo para que haga nuestro día feliz
Un estudio de la Universidad de California en San Diego ha concluido que los bebés sonríen conscientemente a sus padres esperando que el gesto les sea devuelto.
Conductas evaluadas
El estudio analizó a las madres y a los 13 bebés de entre 4 y 17 semanas de nacidos. Se analizaron conductas basadas en 4 objetivos para poder dilucidar que producía sonrisas simultáneas entre madres e hijos, sonrisas de madres y seriedad del bebé, sonrisas de bebés y seriedad de las madres y seriedad de ambos utilizando técnicas de robótica, psicología y computación.
Sonrisa intencionada
No cualquier conducta de las madres hizo sonreír a los bebés, pero los pequeños les sonrieron a sus madres cuando ellas les sonrieron especialmente a ellos.
El tiempo de respuesta y su importancia
Cuando las madres sonreían y volteaban a ver a su bebé, estos no les regresaban el gesto. Esto se debe a que los bebés toman el tiempo de las sonrisas como lo hacen los comediantes para que sus chistes tengan mayor efecto. Las sonrisas por lo tanto deben dirigirse sólo a los bebés y deben ser espontáneas.
La importancia de los juegos
Los científicos aseguraron que los juegos son primordiales para que el bebé sonría. Otro estudio asegura que los niños aprenden por imitación debido ma su aguda percepción desde que nacen y la respuesta neurológica ante aquello. Los bebés imitaran a sus madres si ellas están felices.
Una pequeña pero contundente muestra
Quienes realizaron el estudio, reconocen que la muestra fue muy pequeña, pero con resultados contundentes ya que se sientan las bases de la interacción entre padres y bebés, lo que no se había explorado y lo que demuestra que los niños se comunican desde pequeños y aprenden todo.
Aprendizaje continuo
Los cerebros de los bebés se activan mediante patrones cuando un adulto realiza una tarea con alguna parte de su cuerpo esto quiere decir que si toman un juguete con la mano, ellos también lo harán y es por ello que cuando sus madres sonríen, ellos también lo hacen.