Probablemente has notado que tienes la tendencia a acumular grasa en determinada parte de tu cuerpo. Para resolverlo, de seguro has tratado de probar la dieta de tu mejor amiga y no ha funcionad, bueno, la razón a todo esto es que no todos subimos de peso de la misma forma. Es cierto que nuestros hábitos influyen en la figura que tenemos, pero es probable que tengamos más dificultades para adelgazar debido al tipo de cuerpo que heredamos de nuestros padres y antepasados.
El psicólogo norteamericano William Herbert Sheldon llegó a una clasificación de cuerpos de tres tipos o somatipos: ectomorfo, mesomorfo y endomorfo.
Afortunadamente, de acuerdo con los datos de la Universidad de Houston (Estados Unidos), los nutricionistas, entrenadores y médicos han tenido en cuenta dicha información para diseñar planes de alimentación personalizados. Es por eso que identificar el tipo de cuerpo es una de las claves para lograr dietas exitosas y adaptadas a las necesidades de cada cuerpo.
Cuerpo ectomorfo o “tipo tubo”
Este tipo de cuerpo es delgado. En este grupo se incluyen aquellas personas que tienen dificultades para subir de peso. nunca olviden que es de suma importancia consultar al médico para descartar cualquier condición médica. Aunque, por lo general, el cuerpo es bajo en grasa, presenta dificultades para ganar masa muscular. Lo ideal es que la dieta esté compuesta por:
Carbohidratos: 55%
Proteína: 25%
Grasa: 20%
Recomendación de Alimentos
Si perteneces a este grupo es importante que incluyas en tu dieta:
Legumbres
Carnes magras
Lácteos y huevos
Verduras y frutas (palta)
Frutos secos
Aceite de oliva
Cereales integrales
Ejercicio físico
Los ejercicios con pesas o de alta exigencia física son idóneos para moldear la figura y aumentar medidas. Al hacer ejercicio físico, las personas ectomorfas deben hacer poca actividad cardiovascular yenfocarse en movimientos de desarrollo muscular.
Cuerpo mesomorfo o “forma de manzana”
También conocido como “cuerpo forma de manzana”, no necesariamente son obesas. Su inconveniente radica en que la grasa tiende a acumularse en la zona de la cintura. Esta situación hace que, al aumentar de peso, se formen esos molestos “michelines” en la región abdominal. Además, debido a los malos hábitos dietarios, su vientre suele inflamarse con más facilidad. La dieta ideal para las mujeres de esta categoría debería componerse de:
Carbohidratos: 40%
Proteínas: 30%
Grasas: 30%
Recomendación de Alimentos
Si perteneces a este grupo procura incluir en tu dieta:
Frutas y vegetales
Carnes magras
Lácteos bajos en grasa
Frutos secos y semillas
Cereales integrales y legumbres
Siempre evitar:
Comida chatarra o procesada
Refrescos o gaseosas
Frituras y enlatados
Harinas refinadas
Ejercicio físico
Un entrenamiento que combine ejercicios cardiovasculares y de fuerza resulta idóneo. Los mesomorfos son “genéticamente afortunados” porque tienen más facilidad para moldear su figura. Pese a esto, es fundamental complementar la dieta con ejercicio regular, puesto que, como toda persona, los músculos requieren trabajo y fortalecimiento. Además, es saludable practicar disciplinas como el yoga o el pilates. Estos ayudan a mantener un peso adecuado y tonifican los músculos.
Endomorfo o “cuerpo tipo pera”
El metabolismo lento es lo que los caracteriza y la tendencia a sufrir de sobrepeso, obesidad y otras dificultades metabólicas. Gracias a esto, lo aconsejable es bajar el consumo de 200 a 500 calorías diarias con relación a la cantidad recomendada. Además, se debe limitar el consumo de sal, ya que es más frecuente tener problemas de retención de líquidos.
Recomendación de Alimentos
Grasas saludables, como el aceite de oliva y el aguacate
Frutas y vegetales ricos en agua
Cereales integrales
Carnes magras y pescados
Reduce al máximo y, en la medida de lo posible, evita:
Comida chatarra y procesados
Comida rica en sodio
Bebidas azucaradas o gaseosas
Dulces y productos de panadería
Ejercicio físico
Los endomorfos deben dedicar alrededor de 30 minutos diarios a ejercicios aeróbicos de ritmo moderado. Recomendamos caminar, trotar o andar en bicicleta son algunas de las actividades que resultan idóneas para ayudar a equilibrar el peso corporal.
Una vez se empiece a bajar de peso, lo apropiado es empezar a incluir ejercicios de fuerza, dos o tres veces a la semana. No es simple reconocer nuestro tipo de cuerpo, ya que muchas veces notamos características de dos o más somatipos. No obstante, en general, tenemos más tendencia a pertenecer a uno en específico. Trata de averiguar a qué grupo perteneces y atrévete a mejorar tu vida.