La neumonía es más peligrosa en niños y ancianos pues estos son grupos de riesgo.
La neumonía es una enfermedad que puede ser grave y por eso es importante conocer sus síntomas para tener un cuidado especial con ancianos y niños.
Siempre será el médico quien te dará un tratamiento adecuado, pero aquí te dejaremos algunos consejos sencillos para complementar aquello y mejorar tu salud.
Causas de la neumonía
Esta es una enfermedad frecuente en ancianos debido a que tienen un sistema inmunológico más vulnerable.
La neumonía es una infección al pulmón que se genera por microorganismos, virus, hongos y bacterias que atacan los alvéolos y causan que estos se inflamen. La bacteria más frecuente es el neumococos.
Las defensas naturales de nuestras vías respiratorias evitan que las bacterias lleguen al pulmón, por eso las repelemos al toser.
Luego, tenemos células que nos dan inmunidad frente a enemigos externos por lo que una neumonía se presenta por un sistema inmune débil.
Otro origen puede ser que eres fumador o diabético, tienes problemas al riñón o al hígado. En estos casos el sistema inmune se debilita y nos hace más vulnerables a las bacterias.
Síntomas de la neumonía
Los síntomas pueden ser variables:
- En la neumonía típica aparecen entre 2 a 3 días y se siente cansancio, dolor en el pecho, presión o dificultad para respirar. Puede acompañarse de tos fuerte con expulsión de mucosidad y unas décimas de fiebre y escalofríos.
- En la neumonía atípica los síntomas son complejos y pueden confundirse con el de otras enfermedades. Se aprecia dolor de cabeza y articulaciones, fiebre, malestar muscular, tos seca y sin expectoración, puede haber cansancio y el dolor torácico es más débil que la típica.
Los síntomas se consideran graves is hay pulsaciones rápidas, ahogos o pérdida de conocimiento.
La fiebre alta es peligrosa, por eso si la padeces, lo mejor es consultar a tu médico.
Tratamientos naturales
Advertimos que lo mejor es consultar a un médico, pues en casos graves se requerirá de hospitalización.
Generalmente los casos se resuelven bien, a menos que se trate de una persona mayor.
Baños de vapor
Despejan y desinflaman. El vapor caliente de un baño permitirá eliminar la resistencia a la mucosidad en los alvéolos y abrir las vías respiratorias.
Debes llenar la bañera con agua bien caliente y añadir una tasa de sal gorda, más dos vasos de agua oxigenada.
Debes relajarte en el agua y respirar de manera normal, envolviéndote con el vapor. Disfruta de este baño por al menos 20 minutos.
Infusión de jengibre
El jengibre es una planta natural que ayuda a desinflamar y puede actuar como antibiótico y calmante sin efectos secundarios. Prepara dos infusiones al día para beber y reponerte de la neumonía.
Remedio de ajo y cebolla
Si bien puede tener mal sabor, combinar cebolla y ajo es un remedio efectivo para tratar la neumonía.
Esto desinflama. Debes picar dos ajos y unos 50 gramos de cebolla muy fina y añadir todo a un vaso de agua. Puedes incluir una cucharada de miel, luego mezcla todo y bébelo por las mañanas.
Jugo de zanahoria
Puedes beberlo antes de cenar. La zanahoria fortalece los pulmones y ex rica en antioxidantes para reparar el daño en el tejido.
Las zanahorias poseen vitamina A, calcio, hierro, potasio, magnesio, vitaminas del complejo B y fósforo.
Debes hacer un licuado con dos zanahorias y añadir un vaso de agua para aprovechar sus beneficios.
La neumonía tratada a tiempo puede superarse sin problemas, por eso es importante que consultes a tu médico.
