Hace años que estamos viviendo los efectos del cambio climático alrededor del mundo y la única solución, a esta altura, es comenzar a cuidar el ambiente y reutilizar todo lo que sea posible para evitar producir más y más desperdicios que finalmente terminan en el mar.
Los jóvenes son quienes más conscientes se han vuelto en este último tiempo, como una chica de la India, específicamente del pueblo de Telangana, que decidió crear macetas a partir de las cáscaras del maní.
Srija A participa activamente en campañas para sembrar árboles alrededor de su escuela y otros lugares. Pero un día estaba cavando la tierra para plantar un árbol y se sorprendió al encontrar una bolsa de plástico bajo tierra.
“Inmediatamente me di cuenta de que se trataba de uno de los primeros árboles jóvenes. No quería que esto continuara todos los años, así que comencé a pensar en una solución sostenible para cultivar plántulas”.
Srija A
No fue un trabajo fácil y le llevó un tiempo de investigación largo, pero finalmente logró crear una maceta biodegradable hecha con las cáscaras de maní. De esta manera nadie debía volver a usar plástico para cuidar las plantas antes de sembrarlas.
En el pueblo donde vive Srija suele haber mucho maní, por lo que también muchas cáscaras eran desperdiciadas.
“Por lo general, las cáscaras se muelen en polvo y se utilizan como fuente de energía o se convierten en pulpa y se utilizan como abono. Con la ayuda de mi mentor y profesor de matemáticas, Augustien P, aprendí que las cáscaras son ricas en fósforo y calcio”.
Srija A
Con estos conocimientos intentó transformarlas en algo más duro. En sus primeros intentos no tuvo suerte por la fragilidad de las cáscaras de maní, pero luego aprendió a endurecerlas con ayuda de otros ingredientes naturales y logró darle la resistencia necesaria para sostener a las plantas.
Cuando tuvo todo listo decidió probarlas y se convirtieron en un éxito. Encontró la forma más sostenible de eliminar el plástico en los procesos de siembra.
Por ahora las fabrica a mano, pero planea crear una maquinaria para industrializar el proceso.
Srija espera que de este modo se puedan hacer hasta 10 mil para julio del 2021.