Debemos acostumbrarnos a consumir linaza.
Las semillas de lino poseen ácidos grasos omega 3, grasa poliinsaturada que ayuda a que nuestro organismo funcione adecuadamente, lo que incluye nuestro cerebro. Además al ser una buena fuente de fibra, combaten el estreñimiento.
Una de las causas más comentadas del estreñimiento es consumir poca fibra, pero hay más factores que pueden influir en esto como el viajar, los cambios horarios, el estrés y los cambios en tu rutina.
Lo bueno es que puedes mejorar tu movilidad intestinal mediante una buena alimentación, hidratación y la práctica de ejercicio, aunque esto no excluye las indicaciones de tu médico.
¿Cómo usar la linaza para el estreñimiento?
Las semillas de lino poseen alta cantidad de mucílagos, es decir de fibra soluble. Al entrar en contacto con el agua liberan estos mucílagos haciendo que el líquido se vuelva espeso.
Una de las formas recomendadas de consumir estas semillas para combatir el estreñimiento es sumergir las semillas en un vaso con agua durante una noche y al día siguiente, beber el agua y las semillas en ayunas.
Si la textura del agua se te hace desagradable, puedes tomar las semillas con leche, zumos, yogur natural o ensaladas lo que logrará que también se liberen mucílagos en el entorno acuoso del intestino.
¿Cómo funcionan los mucílagos?
Los mucílagos forman una pasta que aumenta el volumen de las heces, lo que acelera su arrastre en el intestino. Esto hace que las semillas de lino sean diferentes a los laxantes que hacen que el cuerpo se acostumbre a ellos y se genere una adicción para evacuar correctamente.
Además las fibras solubles de las semillas pueden retener toxinas en el organismo y arrojarlas con las heces antes de ser absorbidas por el intestino.
Estas semillas poseen componentes que ayudan al buen funcionamiento de tu organismo como el ácido alfa-linolénico, ácido graso que pertenece al grupo de los ácidos omega 3 que ayudan a la reducción del colesterol malo.
Estas semillas también tienen moléculas con propiedades antiinflamatorias como la luteolina o el ácido oleico.
Propiedades anticancerígenas de las semillas de lino
Las semillas de lino poseen moléculas eficaces contra las células cancerosas de colon y mamas.
Si se consumen con regularidad, ayudan contra enfermedades inflamatorias debido a su alto nivel de ácidos grasos omega 3.
Las semillas también ayudan a un mejor funcionamiento del sistema digestivo, el aparato urinario y respiratorio.
Lo importante es consumir semillas de lino regularmente y no usarlas sólo en caso de emergencia.