El hígado graso es una de las grandes epidemias de la actualidad, es por ello que se llevan a cabo cada vez más investigaciones desarrolladas al respecto, con el fin de dar solución a estar realidad. El té y el café se alzan como excelentes aliados para tratar esta enfermedad.
Hasta hace poco el café tenía mala fama en materia de salud. Su consumo solía estar asociado a problemas cardíacos ya que eleva la tensión arterial y era común que los médicos nos recomendaran evitar su consumo. Lo mismo ocurría con el té, en especial el té negro.
Pero esta tendencia está cambiando gracias a una serie de estudios que nos están demostrando los grandes beneficios los grandes beneficios tanto del té como del café, para tratar esta enfermedad, pero eso sí, consumidos siempre con moderación.
La Universidad de Duke en Estados Unidos ha publicado un estudio donde prueban que la cafeína presente en le café y en el té se enfrentan a esas grasas almacenadas en las células de nuestro hígado. Lejos de dañar este órgano, lo protegen de a acción de las grasas. Este estudio ha sido publicado en la revista “Hepatology”.
Consumo de té y café para prevenir el hígado graso
El estudio indica que lo ideal es tomar 4 tazas al día, pero no vasos, sino que tazas pequeñas. Lo más ajustado sería tomar 2 tazas de café y una de té. El café se debiera tomar en el desayuno y tras el almuerzo, para después de media tarde tomar una taza de té. Puede ser té rojo, verde o el que desees, aunque últimamente está de moda el te blanco porque contiene la mayor cantidad de antioxidantes.
Cuidado, porque si eres hipertenso no será adecuada la ingesta del café, de todos modos lo mejor será consultar con tu médico si puedes consumir café para trata el hígado graso.
Prevenir y curar el hígado graso
El consumo adecuado de café no solo sirve para tratar el hígado graso, sino que existen muchos estudios que avalan el beneficio para tratar la diabetes, los síntomas del Párkinson y también para mejorar la memoria.
Por su parte los beneficios del té son innumerables, un aporte magnífico de antioxidantes capaces de mejorar nuestra circulación y reducir el colesterol malo. Es ideal que lo incluyas en tu dieta.
Café, té y una dieta adecuada
Limitarte solo al consumo de café o te no te servirá mucho para eliminar los lípidos del hígado si continúas llevando una dieta dañina e incorrecta. Debes acompañarlo de una nutrición adecuada y balanceada. Eliminar el alcohol, el tabaco, dejar de lado la comida fácil llena de grasas y harinas refinadas que tanto daño hacen a nuestro organismo. Aumentar el aporte de frutas y verduras y también de infusiones.
El ejercicio también es fundamental
El café, el té, una dieta adecuada y también el ejercicio forma parte de los consejos que debemos seguir para tratar o prevenir el hígado graso. El deporte mejora nuestra salud, aporta más oxígeno a nuestra circulación para dotar de más lubridad a nuestro corazón y nuestros músculos. Pero lamentablemente el sedentarismo es uno de los peores enemigos de nuestra sociedad y también uno de los mayores riesgos para nuestra salud.
Todos somos capaces de curar el hígado graso, solo se necesita cambiar los hábitos y sobre todo querernos un poco más.