No hay nada como un postre tradicional y el arroz con leche es uno de esos. Además de rico, también es económico y apto para servirse después de cualquier plato. La idea es que lo prepares pero no hagas raciones muy grandes ya que es muy contundente.
El arroz con leche requiere de pocos ingredientes y a tu familia le encantará sobre todo si lo sirves en unos bonitos recipientes que lo hagan atractivo a la vista. Anímate a preparar este postre que de seguro hasta tu abuela preparó alguna vez, para que evoques sabores y recuerdos de la infancia.
Lo que necesitas para 6 porciones:
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- 1 litro de leche
- 200 ml de nata líquida para postres o crema de leche
- 150 g de arroz bomba o arroz de grano redondo
- 150 g de azúcar
- 1 pizca de sal
- cuatro tiras de piel de limón
- 1 rama de canela
- 1 cucharadita de aroma de vainilla
- canela molida
1. Vierte la leche en un cazo añadiendo la crema o nata de leche, agrega la canela partida, las pieles del limón, un poquito de sal y el arroz. Revuelve un poco y deja que el arroz se vaya cociendo. Cuando comience a hervir baja el fuego, pero no dejes que deje de hervir. Puedes remover de vez en cuando para que el arroz se vaya ablandando.
2. Tras 20 minutos verás que el arroz espesa. Añade azúcar, una cucharadita de esencia de vainilla y déjalo entre 5 a 10 minutos más en el fuego. Remueve de vez en cuando. Retira del fuego cuando tome una textura cremosa.
3. Retira la piel del limón y la rama de canela. Sirve el arroz con leche en porciones individuales que no sean muy grandes. Una vez que esté frío espolvorea un poco de canela con un colador ya que así la canela quedará mejor repartida.
Consejo:
Si la receta te gusta más espesa, añade un poco más de arroz. Al contrario si te gusta más caldoso, rectifica al final con un poquito de leche.
Para cortar la piel del limón sin que salga la parte blanca, usa un pelador.
Ahora sólo queda disfrutar.
