Hay madres de todo tipo: unas son sobreprotectoras, otras más liberales, unas son más frías y algunas muy cariñosa. Las más criticadas son aquellas que son muy cariñosas con sus hijos, pero tranquila que esto no quiere decir que los malcríes.
Que sobreproteges a tu hijo, que eres empalagosa, siempre hay algo que criticar, sobre todo cuando eres madre. Pero lo mejor que puedes hacer ante esto es seguir tu instinto.
Si eres una madre cariñosa, sigue demostrando amor a tu hijo, porque el te agradecerá todo ese afecto que le dará seguridad, inteligencia emocional y ayudará a su autoestima.
Con tus demostraciones de cariño no le haces mal a tu hijo, al contrario, estás ayudando a que su desarrollo sea sano y hermoso.
5 ventajas de los hijos con madres cariñosas
Ser una madre cariñosa no está ligado a ser permisiva. Los psicólogos defienden las manifestaciones de cariño. Lo único que tiene efectos negativos es la falta de disciplina y de límites.
Un beso, un abrazo son necesarios para tu hijo porque en él tienen efectos muy positivos:
- Fortalece el lazo de madre e hijo: Se genera confianza, lo que es vital para una educación sólida en la que se expliquen lo sí y los no con lo que se ganará obediencia, eliminando los secretos entre hijo y madre.
- El niño se siente protegido y aumenta su autoestima: El niño no teme a las adversidades debido a que siente que su madre está con él. El amor y sus demostraciones nutren su fuerza y valentía. E niño se sentirá invencible pues el cariño de su madre le dara seguridad en sí mismo.
- E niño desarrolla su inteligencia emocional: La inteligencia emocional hace a un niño feliz. Una madre cariñosa ayudará a su hijo a controlar sentimientos y a tolerar la frustración.
- Favorece la comunicación en detrimento de la introversión: El niño no tendrá problemas en hablar con su madre sin importar el tema a tratar, ya que su madre es su confidente. El menor será extrovertido y vencerá el miedo y la timidez cuando se relacione con los demás.
- Empatía y cariño por su entorno: Estos niños serán más empáticos y comprensivos con los demás y enfrentarán menos complicaciones cuando deban expresar sus emociones.