El ajo potencia el sabor de tus comidas y por eso se usa en múltiples preparaciones.
El ajo sazona tus comidas y tiene propiedades medicinales para regular la presión alta y evitar el colesterol en las arterias según Avicenna Journal Phytomed.
Cultivar ajos tiene múltiples beneficios para tu alimentación y salud.
Ventajas de cultivar ajos en casa
Cultivando ajos en casa, tendrás este producto siempre fresco para darle sabor a tus comidas y además tiene otros beneficios como:
- Tener un cultivo libre de fertilizantes y agentes tóxicos.
- Esta actividad es educativa ya que te enseña a tener paciencia, a ser dedicado y a liberar tensiones para nuestro mayor bienestar.
- El olor del ajo evoca platos muy ricos y momentos gratos con amigos y familia.
- El costo del ajo es inferior a largo plazo y te ayudará a ahorrar.
Lo que necesitas para hacer tu cultivo de ajos
Sembrar ajos es muy fácil y sólo deberás asegurarte de que tengan luz y agua. Deberás regarlos frecuentemente para que la tierra esté hidratada.
Para ello debes comprar una cabeza de ajo y separar sus dientes sin quitar su cáscara. Puedes preparar el terreno con un fertilizante natural. Si preparar una capa de tierra, puedes alternarla con zurcos y montículos donde plantarás las semillas.
Luego debes enterrar los ajos a una profundidad de unos 10 centímetros con la punta hacía arriba. Debes ponerlos separados por 15 centímetros entre cada diente. Debes tener en cuenta que por cada semilla obtendrás una cabeza de ajo completa.
Aunque esto es muy sencillo debes considerar algunos factores para preparar la tierra y los cultivos.
Consideraciones previas para cultivar ajos
- La mejor época para sembrar ajos es en otoño. Si estos son morados la mejor época es la primavera.
- Si decides plantarlos en maceteros, el volumen mínimo debe ser de 3 litros y la profundidad de estos debe de ser al menos de 25 centímetros.
- Si plantas en un huerto, la distancia entre los cultivos debe de ser al menos de 30 centímetros para que los ajos tengan espacio suficiente para crecer.
- Luego de plantar tus ajos, obtendrás tu primera cosecha en 3 meses y medio.
Necesitas tierra fértil para que el cultivo sea exitoso y se recomienda agregar una capa de compost o estiércol ligero para nutrir la tierra.
Se aconseja usar fertilizantes naturales para darle densidad al suelo y tener mayor cantidad y calidad de nutrientes.
El cuidado del cultivo de ajos
Las plantas de ajo requieren de sol y agua, por eso debes plantarlos en un sitio con exposición al sol que puede ser tu balcón o los alféizares de las ventanas.
Debes regar el huerto con frecuencia para que la tierra no se deshidrate y tus cultivos no mueran. E agua que debes agregar a la tierra dependerá del clima del lugar donde los plantes.
Si riegas tus ajos con mucha agua, estos podrían adquirir enfermedades, pero si la tierra se seca, los ajos crecerán muy pequeños y puede que la planta no se dé.
Anímate y planta tus ajos
El ajo es una planta perfecta para iniciarte en cultivar.
Tener ajos es muy sencillo, pero debes reducir las dificultades para que crezcan.