Uno de los mejores remedios caseros que podemos encontrar para aliviar el dolor es este preparado de jengibre con aceite de oliva, ya que se trata de un poderoso antiinflamatorio, analgésico y diurético. Ayuda a mejorar la circulación sanguínea y los problemas digestivos.
Aunque la raíz de jengibre es conocida por sus cualidades culinarias y es común encontrarlo como aliño en distintas preparaciones, también se caracteriza por sus propiedades regeneradoras y afrodisíacas. Además se utiliza como aromatizante por su exquisito olor.
Minerales, vitaminas y gingeroles
El jengibre es una fuente de calcio, aceites esenciales, aminoácidos, fósforo y vitaminas B y C, lo que ayuda a reforzar el sistema inmunitario. Sus gingeroles lo convierten en un gran aliado contra el cáncer de ovarios y de colon. También es un poderoso expectorante para casos de bronquitis, asma, gripe y otras enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio.
El preparado de jengibre y aceite de oliva es una excelente opción para reemplazar los analgésicos y calmar el dolor naturalmente. Gracias a sus propiedades diuréticas, elimina el exceso de líquido en las articulaciones, lo que reduce la inflamación.
Alivia el estómago y los intestinos
El jengibre ayuda en el tratamiento de la dispepsia, la flatulencia, los espasmos estomacales y la indigestión, según afirma la Universidad Autónoma Metropolitana (México). Si nos enfrentamos a una intoxicación por alimentos, infecciones de los intestinos e incluso a una disentería bacteriana, el preparado de jengibre y aceite de oliva es un remedio totalmente indicado.
Preparado de jengibre y aceite de oliva
Ingredientes
- 1 taza de jengibre muy fresco (150 g)
- 1 taza de aceite de oliva (250 g)
Preparación
- Lavar el jengibre y dejar secar durante dos horas
- Poner el aceite de oliva en un recipiente para horno.
- Cortar el jengibre, sin retirar la piel y rallarlo.
- Añadir al recipiente con aceite de oliva y mezcla bien.
- Llevar la mezcla al horno a una temperatura de 150 ºC. Dejar hervir durante dos horas.
- Cuando la mezcla esté fría, verter en un colador de tela para eliminar los restos de jengibre. Exprimir hasta que no quede aceite en la tela.
- Guardar en botellas de vidrio, en un lugar fresco y seco.
- El preparado de jengibre y aceite de oliva puede durar hasta seis meses.
Usos del preparado de jengibre y aceite de oliva
La cantidad necesaria de este preparado de jengibre y aceite de oliva dependerá de la dolencia que se experimente. Además su olor repele mosquitos y otros insectos, de acuerdo a este estudio de la Universidad Dammam (Arabia Saudí).
Artritis y dolore musculares
Para revitalizar la mente y el cuerpo, se pueden consumir de dos a tres gotas diarias. Para aliviar los molestos dolores de la artritis o dolores musculares y de espalda, se usa la misma dosis para aplicar un masaje en la zona afectada, ya que tiene propiedades antiinflamatorias, según afirma este estudio de la Universidad Isfahan, en Irán.
Gases y bronquitis
Cuando se sufre de diarrea o de gases, basta aplicar una gota en el abdomen y realizar suaves masajes para aliviar el dolor, debido a su poder antiinflamatorio. Este preparado también ayuda a combatir al bronquitis, el asma y la tos, eliminando la flema en los pulmones y la garganta, según señala esta investigación de la Universidad Urmia (Irán).
Contra el colesterol y la hipertensión
El consumo de este preparado de jengibre y aceite de oliva minimiza el riesgo de hipertensión, según afirma este estudio de la Universidad de Teherán (Irán).
Los antioxidantes, vitaminas y minerales de esta raíz la convierten en un aliado ideal para la salud. Prepara este aceite de jengibre y alivia el dolor causado por diferentes enfermedades.
