Siempre debemos cuidar nuestro cuerpo para que funciones de forma perfecta. Nunca requiere nada de lo común, bastan ciertos aspectos básicos para que el rendimiento de nuestro organismo esté al cien por ciento, como una máquina bien aceitada. Y es que usamos nuestro cuerpo a diario, así que es casi inevitable que algunas zonas se lastimen o comiencen a lucir diferente. Pero es nuestra responsabilidad cuidarlas.
Es nuestra piel la que más cambios tiene a lo largo de la vida, pues cumple una función bastante sacrificada. Es el órgano más grande del cuerpo y tiene como función protegernos siempre. Por ello, debemos hacer lo posible por nutrirla de la mejor forma que podamos.
Para ello, la vitamina E es esencial y a continuación te enseñaremos a usarla para sacar el máximo provecho de sus propiedades.
Opción #1
Mezcla una zanahoria con un aguacate y el líquido de una cápsula de vitamina E. Aplícalo en tu cara, déjalo reposar por 20 minutos y retira con abundante agua fría.
El aguacate es un fruto rico en vitamina E que potenciará los efectos de la mascarilla. Además, la zanahoria tiene betacaroteno, que renueva nuestro colágeno.
Opción #2
Mezclamos 1 plátano maduro con el líquido de dos cápsulas de vitamina E. Aplicamos en nuestra cara, dejando reposar por 20 minutos y eliminando con agua fría posteriormente.
El plátano tiene una gran cantidad de potasio que es ideal para tratar las líneas de expresión de tu cara.
La clave para la piel sana es tener los nutrientes necesarios para que pueda regenerarse sin problemas. Además, recomendamos tomar mucha agua, que ayuda mucho para la piel y nuestra salud en general.